"Eligieron mi nombre entre mi abuela materna con quién tengo un lazo muy fuerte y mis padres, nací en Córdoba Capital pero hasta los 15 años viví en la ciudad de Arroyito".

Para explicar sus fuertes raíces expresó "Vengo de una familia de docentes y comunicadores. Mi abuela materna fue directora de la escuela José Maria Paz, también mi abuela paterna. Ethel Hubaide, la madre de mi mamá fue la que llevó la escuela primaria para adultos que hoy lleva su nombre a Arroyito".

Volviendo a su infancia comentó "Vivía con mis cuatro hermanos, soy la única mujer, mi padre y mi madre que falleció hace poco".

Continuando con el interminable viaje en el tiempo y la perspectiva única que nos regala para conocernos agregó: "Siempre hice lo que quise, en aquel momento Arroyito era un pueblo y a mí me gustaba mucho jugar armando chozas y trepando árboles. Soy amante del movimiento y nunca me atrajeron mucho los juegos de mujeres como las muñecas. La infancia fue hermosa, somos una familia muy unida".

En distintas ocasiones la política atravesó la vida de Gabriela: "Después de los 15 años nos vinimos a vivir a Córdoba por problemas laborales y en parte políticos de mi padre que trabajaba en el Banco Provincia y mi madre era la jefa del registro civil y la trasladaron a la capital".

Su padre fue desvinculado de la entidad financiera y buscando justicia la familia envió una carta al entonces presidente Ricardo Alfonsín quién les respondió con una invitación a la Casa Rosada y luego de un tiempo fue empleado nuevamente en la sucursal del banco pero en la ciudad de Córdoba.

Incluso antes de estos episodios Gaby ya demostraba su espíritu rebelde ante las injusticias "En quinto grado organicé la recaudación de comida para los soldados que estaban en la guerra de Malvinas, nunca soporte las injusticias".

Retomando a su adolescencia expresó: "Termine el secundario en una escuela de Monjas en Córdoba y luego ingresé a la Universidad dónde estudié tres años el profesorado en Educación Física, abandonando por qué el director descubre que estoy embarazada, allí conozco al papá de mis 4 hijos".

Para comenzar a nutrir su futura capacidad de defender a los más vulnerables le dió claridad a su juventud "Estudié Psicología Social en la Escuela de Pichón Riviere. Esta corriente en la Psicología es la que me interesa porque es lo que yo ya estaba haciendo, trabajar en los barrios más carenciados por la ausencia del estado, trabajé con jóvenes con consumo problematico entre otras experiencias barriales fuertes".

Y continuó: "También me recibí de Acompañante Terapéutico en Salud Mental. Muchos años trabaje con familias con hijos con discapacidad".

María Victoria, una de sus cuatro hijas tiene una discapacidad severa pero su espíritu transformador motivado profundamente por la tenacidad de su madre ocasionó un milagro en el futuro.

Pero la lucha por la justicia social de la protagonista de esta apasionante historia de Perfiles Urbanos Nova se estaba profundizando cada vez más: "Al ver tanta injusticia, también me separo del papá de mis hijos, sufrí violencia de género, me dedico a buscar mi identidad espiritual y me meto de cabeza a realizar yoga. Primero para mí y después empiezo a estudiar para dar clases".

Un intenso llamado de la madre tierra la moviliza: "Empiezo la militancia ambiental, luego de algunas idas y vueltas como mudanzas y cambios laborales me conecto nuevamente con la militancia y me despierta las ganas de estudiar y empiezo Comunicación Social".

La hermana del prestigioso periodista de los SRT Juan Cruz Taborda Varela eligió un viaje interno sin principio ni final. "Mientras estudio milito en la Mesa de Trabajo por los Derechos Humanos de Córdoba y asambleas ambientales de Punilla, acompaño a los pueblos indígenas tanto en Punilla como en otras provincias como Santiago del Estero".

La cosa se empieza a poner brava pero Gaby nunca le tuvo miedo a poner el cuerpo: "Comienza toda la lucha por defender los derechos de la Tierra, los bienes naturales, en contra de Caminos de las Sierras y el gobierno de Juan Schiaretti ya que se venía la construcción de la autovía en nuestro valle serrano".

La lucha de cientos de defensores ambientales y pueblos originario sufrió una fuerte persecución policial y judicial "A raíz de esta postura me persiguen, se meten en mi casa, me buscan silenciar al punto de ser detenida e imputada. Al día de hoy tengo una elevación a juicio junto a otros 5 compañeros".

Con las raíces y los lazos familiares femeninos a flor de piel explicó "Mi abuela materna me introdujo en el socialismo enseñándome a mirar más allá de lo que tenemos al frente y con su ejemplo aprendí que no ser analfabeto nos salva de un montón de injusticias como cuando el estado nos miente".

"La primaria la hice en un colegio que era de varones y mi abuela como directora lo hizo mixto, era la única en mi aula y sufrí el abuso, me dolió mucho, me echaban en cara ser la única mujer porque tenía una pariente como directora, siempre fuí libre y por eso decidí hacer la secundaria en una escuela de monjas".

Con sinceridad y transparencia trajo a la charla su sentir: "La violencia me fortaleció y si bien mi padre me enseñó a escuchar a los otros y mi madre se metió a las villas a hacer documentos de identidad es un camino que elegí y el sentir de la ancestralidad a flor de piel viene desde muy chiquita".

El fluir de la entrevista decantó en la búsqueda de por qué Gabriela es como es "Somos cinco hermanos y todos fuimos criados igual, mis padres recién se separaron hace un año cuando murió mi mamá, nos inculcaron el valor de la educación pública y aunque todos somos adultos diferentes creo que la coherencia se encuentra en la libertad que nos dieron siempre para decidir y la pluralidad de voces desde lo cultural que siempre estuvieron en el día a día de la familia, eso es mucho más importante que si tenés a todos tus padres o cuando ambos son del mismo sexo".

La búsqueda del equilibrio espiritual llevó a esta mamá guerrera a su logro más grande "Tener una hija discapacitada es una lucha todos los días, si bien es cansador no me pone triste, hasta lo más doloroso me da felicidad y quiero demostrar que se puede vivir de la forma que uno elige aunque tengas una hija con discapacidad como en mi caso".

Su hija María Victoria tiene Síndrome de Rett, y Gaby recordó el momento del diagnóstico "Cuando me enteré lo primero que le dije al padre y a mis padres es que por amor y respeto a mi hija no iba a dejar de ser quien soy, no iba a dejar ni de militar ni de estudiar. Fue fundamental en nuestra crianza poder hablar siempre, me emociono trasladándome a la mesa redonda en la que comíamos con mis padres y hermanos y siempre discutíamos de todo. Hasta el día de hoy tenemos nuestras diferencias y gracias a eso también nos amamos".

Desde que asumió el presidente Javier Milei, Gabriela Taborda Varela quedó desempleada, durante un tiempo realizó notas para los SRT que ya no realiza y la ayudaba su padre, sin embargo, una vez más aprendió de las señales que le daba el camino.

"Decidí vivir más liviana y estoy dando clases de entrenamiento funcional y yoga en el salón comunal de Parque Siquiman".

La madre de José María, María Agustina, Francisco y María Victoria eligió como el momento más significativo de su vida una de las experiencias como madre de una niña discapacitada "Cuando vinimos de Córdoba a Santa María de Punilla María Victoria no caminaba y los médicos me dijeron que no volvería a hacerlo, pero yo terca dije, a mi hija no le va a pasar eso, ella tenía 7 años cuando nos mudamos, yo transitaba mi camino espiritual y de ancestralidad que lo sentía y lo continuó sintiendo hasta los huesos. Sabía que María Victoria sí caminaría, comencé a llevarla al río a nadar, escalabamos montañas y paso a paso hasta el día de hoy logramos con esfuerzo que camine".

Gabriela, fiel a su estilo, le puso broche de oro a la entrevista con palabras imposibles de editar.

"Lo más significativo es que el monte, el agua y la naturaleza le devolvieron la vida a mi hija. Vicky tenía un promedio de vida de 10 años y hoy tiene 27, esto me llevó a defender la madre tierra porque defenderla es proteger la salud de nuestros hijos, es vivir de manera sana".

Luego de conectar con lo más interno del sentir de los abuelos y abuelas originarias Gaby, la inolvidable protagonista de una nueva sección de Perfiles Urbanos NOVA vive con liviandad pero nunca dejará de defender los derechos que conquistamos para vivir en un entorno sano.

Gabriela María del Mar Taborda Varela sentenció con conocimiento y experiencia "Estamos en un momento políticamente difícil donde se está por aprobar el RIGI que va a sumar tragedia a la naturaleza y cuando eso sucede perdemos la salud. Mi mensaje es, limpiemos los ríos, vivamos sanos con amor como decían las madres de plaza de mayo, quiénes hicieron y hacen daño a nuestro territorio pagarán, seguiremos denunciando".