Coletazos nacionales en la economía cordobesa: fin del turismo social en Embalse

El Gobierno nacional acorta los tiempos para llevar a cabo lo que había anunciado respecto a las unidades turísticas de Embalse y Chapadmalal, íconos del turismo social desde los años 50 del siglo 20.
Para Córdoba, el gran complejo hotelero de Embalse ubicado en la región de Río Tercero fue un ícono y había sido motivo de inversiones incluso en la post pandemia de la presidencia anterior.
Pero el desmantelamiento económico y la falta de empatía humana del gobierno libertario aplastó el turismo social, con ello está única alternativa en suelo mediterráneo que enoja a la gestión de Martín Llaryora y por decisión de la Agencia de Administración de Bienes del Estado (Aabe), organismo encargado de su concesión o venta y creado solo con ese objetivo desaparecerá del mapa del turismo social.
Por ejemplo, uno de los trabajadores despedidos explicó a Perfil Córdoba que “han sido sistemáticamente vaciados, abandonados de recursos, sin envío de dinero para la caja chica, para el mantenimiento, el parquizado y demás. La UTE (Unidad Turística Embalse) cuenta con siete hoteles y 51 bungalows, son 600 hectáreas que hoy tienen poco mantenimiento, solo quedaron tres personas para el área de parque, eso es muy poco para un complejo de esta magnitud”.
Ante esta negativa del Gobierno nacional que ya decidió licitar y privatizar, aunque todavía no hay fechas ni se conocieron ofertas, previamente la Municipalidad de Embalse intentó concesionar uno de los hoteles del enorme complejo y no se lo permitieron, los hechos hablan más que las palabras.